Niño de 6 años salva a más de 1000 perros de la muerte
Cuando tenía 4 años, Roman McConn y su familia visitaron un refugio local de animales en Texas, Estados Unidos, en busca de un nuevo perro. Cuando se encontraron con una pequeñita llamada Luna, se podría decir que fue amor a primera vista.
Después de adoptar a Luna, Roman y su familia se dieron cuenta de lo maravillosa que era su perra y quisieron ayudar a otros como ella a encontrar sus hogares para siempre. Comenzaron a ofrecerse como voluntarios en el refugio y Roman rápidamente se involucró más y más en los esfuerzos de rescate.
Pronto el papá de Roman, quien forma parte de la Marina, fue reubicado en el extranjero, así que Roman y su mamá se mudaron de nuevo a su estado natal de Washington. Sin embargo, no hicieron el viaje solos; pues se trajeron 31 perros con ellos para darles una vida mejor.
La madre describió su decisión y nueva aventura con mucho sentido del humor: «Yo diría que somos los rescatistas de Texas que construimos un ferrocarril subterráneo para perros hasta Washington porque el mundo de los perros es mejor aquí en Washington que allá en Texas».
A partir de ahí, el dúo inició este hermoso proyecto de reubicación para perros que tenía como objetivo trasladar a los peludos amigos a refugios de Texas al noroeste del Pacífico. Gracias a los videos informativos de Roman que detallan la edad, raza y características de cada perro, muchos encuentran a sus familias adoptivas antes de comenzar su viaje en esta parte de los Estados Unidos.
Los perros también pueden ser adoptados en varios estados a lo largo de la ruta Washington-Texas. Y, si no tienen una familia que los espere al otro lado, los perros son enviados a sociedades humanitarias hasta que encuentren un hogar.
Roman, que ahora tiene 6 años, trabaja arduamente con su madre para salvar a los perros no deseados y encontrarles un hogar para siempre. Él ayuda protagonizando videos en los que se muestran a los perros en adopción, llamando a familias adoptivas potenciales y ayudando a recaudar dinero para transportar a los perros a través del país. Y aunque se necesita mucho tiempo, energía y dinero para rescatar a los perros, el niño de primer grado está dedicado a la causa. Desde diciembre de 2016, cuando el «Proyecto Viaje por la Libertad» comenzó por primera vez, él y su mamá ya han ayudado a salvar a 1.050 perros, incluyendo en estos números a sus dos mascotas.