El libro de la semana: «El sentido de un final»
¿Tenés ganas de leer pero no sabés qué libro elegir? No te preocupes, en TOPIC te recomendamos todas las semanas un imperdible para que tengas en cuenta.
Esta vez, nuestra opción tiene que ver con uno de los escritores británicos más deliciosos de nuestra época. Se trata de Julian Barnes, una de las mayores revelaciones de la narrativa inglesa de las últimas décadas.
Es autor de doce novelas, Metrolandia, Antes de conocernos, El loro de Flaubert, Mirando al sol, Una historia del mundo en diez capítulos y medio, Hablando del asunto, El puercoespín, Inglaterra, Inglaterra, Amor, etcétera, Arthur & George, El sentido de un final y Niveles de vida, de los libros de relatos Al otro lado del Canal, La mesa limón y Pulso, del delicioso tomito El perfeccionista en la cocina y del libro memorialístico Nada que temer.
Argumento:
Tony Webster y su pandilla conocieron a Adrian en el instituto. Hambrientos de sexo y literatura, atravesaron juntos la adolescencia y se prometieron seguir siendo amigos para siempre. Pero cuando la vida de Adrian dio un vuelco trágico, todos, especialmente Tony, miraron hacia otro lado, se alejaron. Ahora Tony vive solo en un pacífico y próspero retiro, tras una vida opaca que poco tiene que ver con la que fantaseaba en su juventud. Y un día recibe una carta de un abogado: Sarah Ford, la madre de Veronica, su primera novia, le ha legado quinientas libras y un sobre con un manuscrito. Le entregan el dinero y una carta de Sarah, pero el manuscrito nunca llega. Y Tony averigua que son los diarios de Adrian, que ahora están en manos de Veronica y no piensa entregárselos. Y estos diarios son el oscuro, enigmático corazón de una novela espléndida, premiada con el prestigioso Man Booker.
«Nos atrapa como una novela policíaca, una indagación sobre la memoria y la moral que hace estallar un apocalipsis íntimo» (Boyd Tonkin, The Independent).
«Un libro breve, pero no ligero. Julian Barnes revela verdades cristalinas que han tardado toda una vida en endurecerse» (Liesl Schillinger, The New York Times).
«Original, fértil, memorable» (Justin Jordan, The Guardian).