¿Estás depre? Estas posturas de yoga te ayudarán a levantar el ánimo
Ya vamos para casi dos meses de encierro preventivo por el coronavirus, y esto seguramente impacta en tu estado de ánimo. Pero hay que tener mucho cuidado con esto, ya que estar deprimido o tener energía baja puede cambiar radicalmente todo tu entorno y tu cuerpo, incluyendo a los sistemas inmunológico, digestivo, respiratorio, hormonal y cardiovascular. Con esta disciplina milenaria puedes inyectar un poco de optimismo a tu vida.
Existen días malos en estos tiempos tan duros. Es inevitable. No siempre se puede tener un estado de ánimo tranquilo u optimista, pero si llevas largo tiempo decaído, triste, ansioso o sin mucha energía, es importante que hagas algo al respecto.
Los especialistas en salud confirman que el ejercicio es una excelente opción para inyectar vigor, pues nivela la dopamina (causante de la sensación de relajación y lo placentero), la serotonina (estado de ánimo) y las endorfinas (felicidad). Por consiguiente, el yoga también elevará estas sustancias en tu cuerpo; pero, sobre todo, te dará armonía y calma.
De acuerdo con el pionero en yoga para la salud, Gary Kraftsow, esta disciplina es “perfecta para los síntomas físicos, altibajos emocionales, pensamientos y comportamientos que generan la depresión”. Incorporar esta práctica a tu rutina de vida ayudará a las funciones del sistema simpático y parasimpático del sistema nervioso.
Si estás muy triste, tómate un tiempo y dale una oportunidad al yoga. No hay duda que poco a poco te sentirás más tranquilo, con una mente en calma y con la alegría de vivir.
Te recomendamos estas cinco posturas para levantar tu ánimo:
Urdhva Hastásana: levantar los brazos hacia arriba permite que te sientas más ligero. Mantenerte en equilibrio lleva tu atención al momento presente y te obliga a dejar a un lado las preocupaciones. Párate con la espalda erguida y los pies separados, sube los brazos y entrelaza los dedos. Escoge un punto para centrar tu mirada. Haz al menos cinco respiraciones. Esta postura estimula el riego sanguíneo.
Sarvangásana: asana que calma, relaja y apacigua el sistema nervioso. Con este ejercicio puedes ver las cosas de otro modo, tomar distancia y entender que los cambios también son provechosos. Túmbate sobre el mat, empuja con tus manos las piernas hasta elevarlas y quedar en postura vertical. Llévalas por detrás de la cabeza y apoya las manos en la zona lumbar. Mete la barbilla hacia la garganta.
Virabhadrasana: llamada también Guerrero I, esta postura te conecta con tu guerrero interior. Los expertos lo consideran un potente estiramiento que aumenta la confianza, favorece la autoestima y combate el nerviosismo y la fatiga. De pie, da un paso lateral para separar los pies un metro. Gira el pie izquierdo 90° y el derecho unos 60°, a la izquierda. Dobla la rodilla izquierda hasta formar un ángulo de 90°. Levantas los brazos por encima de la cabeza y presiona las palmas en posición de oración.
Tripadásana: ideal para fortalecer la voluntad. Es una postura compleja, pero cuando logres sostenerla te sentirás orgulloso de tus capacidades. Vitaliza el sistema nervioso y fortalece el equilibrio energético. Ponte en postura de plancha. Lleva una pierna hacia atrás y después la otra, apoya las puntitas de los dedos de los pies en el suelo. Las palmas de las manos a la altura de los hombros sosteniendo tu cuerpo.
Urdvha Mukha: denominada Perro hacia arriba. Cuando el ánimo y el cuerpo están decaídos se tiende a bajar los hombros y a cerrar el pecho. Con esta postura abres el corazón a nuevas oportunidades. La Urdvha Mukha alivia la depresión ya que es una postura extrovertida. Acuéstate boca abajo, estira las piernas hacia atrás con una separación de pocos centímetros. Dobla los codos y estira las palmas de las manos en el suelo. Inspira y presiona tus manos y empújate hacia adelante.