El truco para conservar paltas ya cortadas en la heladera sin que se echen a perder
La palta es un fruto altamente valorado por su sabor, su textura cremosa y sus beneficios nutricionales. Sin embargo, una de las características que dificulta su consumo es su tendencia a oxidarse rápidamente una vez que se corta, o al retirar su cáscara. La oxidación es un proceso químico que ocurre cuando la pulpa de frutas y vegetales, como la manzana o la papa, entra en contacto con el oxígeno del aire.
Este fenómeno puede afectar tanto la apariencia como la calidad de los alimentos, lo que los lleva a desarrollar una tonalidad marrón poco apetecible y un sabor ligeramente amargo. Para prevenir la oxidación y mantener la palta fresca por más tiempo, es recomendable tomar ciertas precauciones. De esta manera se lograrán preservar sus nutrientes y su característica tonalidad verde.
Desde la organización sin fines de lucro Love Food Love Science, administrada por el Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos del Reino Unido, explican que “además de provocar que la fruta cambie de color, la oxidación también puede afectar al contenido de nutrientes de una fruta o verdura. La vitamina C, presente en algunas frutas y verduras, puede oxidarse cuando se expone al aire. Cuanto más tiempo esté expuesta una fruta, menos vitaminas tendrá”.
Debido a esto, es necesario saber cómo ralentizar el proceso de oxidación de la palta, ya que contiene nutrientes valiosos para el organismo que se podrían perder.
Uno de los métodos para conservar la palta fresca en la heladera por más tiempo es tirarle un chorrito de jugo de lima o de limón, ya que el ácido que posee es suficiente para actuar como antioxidante. Lo mismo sucede al elaborar guacamole, ya que el jugo de estas frutas es un ingrediente esencial en la preparación del aderezo de origen mexicano, por lo que esta puede ser otra manera de almacenar el fruto. El aceite de oliva también funciona de manera similar, ya que es antioxidante y además crea una barrera entre la pulpa y el aire que previene el proceso de oxidación.
Otra opción es el utilizar la cebolla porque, según los expertos de la Fundación Española del Corazón, “son ricas en vitaminas del grupo B, y contienen un aporte inferior de vitamina C y E, estas últimas, con efecto antioxidante”. Se puede cortar la cebolla en trozos grandes, colocarla en un envase y posteriormente ubicar la palta cortada con la pulpa hacia arriba para evitar que se modifique su sabor.
Todas estas maneras de conservarla deben ser complementadas por la utilización de recipientes herméticos, bolsas o film que entren en contacto con la pulpa de la fruta y reduzcan en la mayor medida posible su contacto con el aire, además de la refrigeración que ralentiza el proceso de oxidación.
Un método de almacenamiento popular es el utilizar agua fría. Sin embargo, desde la Cleveland Clinic advierten que esto no debe realizarse debido a que el agua actúa como “caldo de cultivo” para bacterias presentes en la piel de la palta, como la Listeria monocytogenes y, en menor medida, la salmonela.
¿Cuánto tiempo se pueden guardar cortadas en la heladera?
Una vez que las paltas están peladas o cortadas, pueden durar, si se conservan adecuadamente, entre 2 y 3 días en la heladera. Sin embargo, se debe evaluar la apariencia y el aroma del fruto antes de consumirlo.
Determinar si una palta está madura es esencial para disfrutar de su textura cremosa y su sabor óptimo. Cuando está lista para consumir, debería ceder ligeramente a la presión suave de los dedos, sin sentirse demasiado blanda o con áreas hundidas. La piel, que puede variar en color desde verde intenso hasta casi negro, debe tener un tono que indique madurez según la variedad a la que pertenece.
Además de la firmeza y el color, otro truco útil es retirar el cabito en la parte superior de la palta. Si el área debajo es de un verde intenso, todavía le falta maduración. Sin embargo, si es de un verde claro casi amarillo, está madura y lista para comer; si es marrón, puede estar pasada. Con estas señales, se puede asegurar que el fruto se encuentre en el punto perfecto para consumir.
Los beneficios de incorporar palta a tu dieta
La palta es rica en grasas saludables, especialmente ácidos grasos monoinsaturados, por lo que ayuda a mantener un corazón sano al reducir el colesterol LDL y aumentar el colesterol HDL. Además, es una excelente fuente de vitaminas y minerales, como la vitamina E y C, y el potasio, que apoyan la función inmune, la salud de la piel y el equilibrio de fluidos en el cuerpo.
Un estudio realizado por expertos de la Universidad de Pensilvania logró determinar que el consumo de una palta al día durante 26 semanas mejoró significativamente la calidad de la dieta de las personas que formaron parte de la investigación. Los 1800 participantes, de 25 años de edad o más, con obesidad abdominal, se dividieron en un grupo de control que no agregó el fruto a su dieta, y otro que sí lo hizo.
Luego del plazo indicado, los científicos concluyeron que la ingesta diaria de palta “aumenta la adherencia a las Guías Alimentarias para los Estadounidenses”, que son una serie de normas para orientar a la población con el objetivo de que logren una alimentación saludable.
Los expertos de la Universidad de Harvard, en tanto, realizaron una investigación mediante la cual llegaron a la siguiente conclusión: “Las personas que comen más aguacate cada semana pueden reducir su riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares en comparación con las personas que rara vez lo comen”. Los datos utilizados pertenecieron a más de 110.000 participantes del Estudio de Salud de Enfermeras y del Estudio de Seguimiento de Profesionales de la Salud. Los resultados mostraron que quienes comían al menos una palta entera a la semana disminuían un 16% el riesgo de desarrollar enfermedad cardiovascular y un 21% de padecer una afección cardíaca.
Desde la National Library of Medicine (NIH) de los Estados Unidos comentan que “la vitamina E es un nutriente liposoluble presente en muchos alimentos. En el cuerpo, actúa como antioxidante, al ayudar a proteger las células contra los daños causados por los radicales libres. Los radicales libres son compuestos que se forman cuando el cuerpo convierte los alimentos que consumimos en energía”.
Este nutriente se encuentra en grandes cantidades en la palta, y juega un papel importante en la protección contra el daño celular y la inflamación, lo que contribuye a la prevención de enfermedades crónicas.
Su alto contenido de fibra favorece una digestión saludable y puede ayudar a mantener la saciedad, lo que contribuye al control del peso. Al incorporar esta fruta versátil en ensaladas, batidos o como complemento en diversas recetas, es posible disfrutar de sus múltiples beneficios para la salud de una manera deliciosa y nutritiva.