El poder de los hábitos: cómo cambiar radicalmente tu forma de vivir
Se llama Charles Duhigg y es un escritor ganador del Pulitzer. Una de sus frases más insistentes es: “Cambiar hábitos puede transformar radicalmente el comportamiento de las personas”, algo que expresa en su libro más exitoso.
Nació en 1974, graduándose en la escuela de negocios de Yale. Es un frecuente columnista en The New York Times. En 2012, publicó el libro: “El poder de los hábitos”, el cual se ha mantenido entre los más vendidos desde entonces.
Su libro le la endosado el reconocimiento como experto en el tema de los hábitos. Charles Duhuigg suele dar conferencias acerca de este asunto, entrevistas y clases. Sus consejos acerca de los hábitos apuntan a aprovecharlos para nuestro beneficio.
Para Charles Duhuigg, los hábitos son el epicentro de lo que hacen los humanos. El 80% de nuestras acciones son hábitos. Son cosas que se hacen en “modo automático”, una manera en que el cerebro ahorra procesos y energía.
– Los hábitos no son casuales, son productos de elecciones que tomamos. Al aceptar esa decisión, y repetirla de modo constante, dejamos de pensar en ella. La acción la seguimos repitiendo de manera sistémica.
– Neurológicamente, el cerebro se deshace de pensar y analizar lo que hacemos cada vez que acometemos una decisión. Lo hace de modo automático, economizando energía.
– Para cambiar un hábito, es necesario tener conciencia de que hacemos cosas sin reflexión involucrada, sino por una vieja decisión que no ha sido revisada. Hay que revisar lo que se hace e iniciar un nuevo proceso.
– ¿Dónde está el problema? El asunto es que el cerebro no puede dirimir entre un buen hábito y un mal hábito. Eso se hace mediante una reflexión más profunda. El cerebro lo que necesita es una recompensa, algo que resulta positivo de un comportamiento.
– Los hábitos dependen de antojos neurológicos. Un mal hábito, como fumar o beber, se corresponden a que damos al cerebro dopamina por el cigarrillo o alcohol. El cerebro repite el ciclo de una acción con un una recompensa como resultado.
– Hay que estar conscientes de nuestros hábitos. Cada cierto tiempo, repasar lo que hacemos y percatarnos de aquellas acciones que efectuamos en “piloto automático”.
– La clave para cambiar los hábitos está en las rutinas. Iniciar rutinas nuevas con disciplina, hasta que se tornen ciclos que se repiten. Es decir, entrenar al cerebro para que haga ciclos nuevos.
¿Suponías esta importancia de los hábitos? Todos tenemos hábitos, así que la primera tarea es repasar cuáles son positivos y cuáles debemos cambiarlos para mejorar.
