Cómo tu smartphone está arruinando tu postura
Al parecer, la tecnología con todos los beneficios que genera, también se está convirtiendo en uno de los grandes males silenciosos de nuestra época. Muchas personas no son realmente conscientes de la cantidad de horas que pasan con la cabeza hacia abajo mirando fijo el móvil.
Esto llega al punto de la adicción, algunos son incapaces de dejar de lado su celular mientras entrenan, cenan con amigos o disfrutan a su familia. ¿El resultado? No sólo la cabeza no se desenchufa y nos perdemos de ver el mundo fuera de la pantaña sino que lastimamos nuestras muñecas y nuestras cervicales a veces permanentemente.
Según un estudio, la mayoría de las personas pueden pasar un promedio de cuatro horas diarias mirando el móvil o la tableta. Mientras tanto, la postura se va resintiendo.
Hay que considerar que una cabeza de adulto pesa entre 4 y 6 kilos y le genera un peso adicional de unos 13 kilos a la columna cuando está inclinada 15 grados hacia adelante. Cuanto mayor la inclinación, mayor la carga.
De hecho, al mirar una pantalla móvil los usuarios no suelen inclinarse 15 sino 60 grados. Esa carga de unos 27 kilos debe ser sostenida por la espalda y el cuello, y esas no son las únicas únicas partes del cuerpo afectadas, ya que, cuanto más tiempo se mantiene la postura, más caen los hombros hacia adelante, se reduce la musculatura del pecho y se extiende la zona de la nuca.
Esta costumbre perniciosa deriva en dolores de cabeza, rectificación de columna e incluso desgaste de los discos.
La solución es limitar a lo necesario el uso de este tipo de dispositivos y realizar actividad física. Puede ser natación, bicicleta o una simple caminata diaria.
Así que ya saben, ¡A apagar esos celulares!