Cuatro técnicas de relajación para un buen estado de salud físico y mental

Es importante intentar mantener un buen estado de salud, no solo a nivel físico, sino también mental. A este respecto, existen algunas prácticas para respirar mejor, relajarnos y encontrar el equilibro, evitando así problemas que puede desencadenar el estrés.

Hoy te contamos cuatro opciones que te ayudarán a mantener tanto tu salud física como mental.

Yoga

Aporta bienestar, ayuda a relajar el sistema nervioso y a reducir el estrés. Se trabajan ejercicios de relajación y respiración para conseguir el equilibrio entre cuerpo y mente. Aumenta la flexibilidad corporal, potencia la fuerza muscular, mejora la movilidad de músculos y articulaciones y trabaja el equilibrio de todo el cuerpo. Además, se incluyen una serie de ejercicios de respiración, lo que aporta beneficios frente al estrés, ya que reduce el ritmo cardíaco y relaja el organismo, facilitando la calma mental, una mejora en el descanso y una mayor concentración.

Meditación

Puede ser una gran aliada para calmar el ruido mental y alcanzar un estado de bienestar y equilibrio emocional. Esta práctica ancestral también presenta beneficios como la reducción de la ansiedad y el estrés. Hacerlo a diario ayuda a mejorar el estado de ánimo, a descansar mejor, relajar la mente, rebajar la tensión muscular y mejorar la salud en general.

Stretching

Los ejercicios de estiramiento muscular deberían formar parte de nuestros hábitos diarios. Son tan importantes como una buena sesión de entrenamiento físico y su práctica es fundamental para la movilidad corporal, la salud muscular y de las articulaciones, así como para evitar lesiones. Ayuda a calmar la mente, relajar los músculos tensos que produce el ritmo frenético diario, ya que reducen los niveles de cortisol, la hormona del estrés.

Pilates

Este método está basado en diferentes disciplinas. DSe trabaja el desarrollo de los músculos internos que ayuda a mantener el equilibrio corporal y fortalece la columna vertebral. Integrándolo en las rutinas de entrenamiento, además de mejorar la postura corporal y reafirmar diferentes grupos musculares, se puede llegar a conseguir un cuerpo fuerte, flexible, armonioso y saludable. En el plano emocional, es beneficioso para alcanzar conciencia corporal, eliminar el ruido mental y deshacer bloqueos o tensiones acumuladas en el inconsciente y llegar a un estado de relajación.