Cómo sumar alimentos basados en plantas a la dieta
En la última década los consumidores latinoamericanos han estado cambiando sus hábitos alimenticios volcándose hacia una dieta que incluya más alimentos de origen vegetal.
Un estudio reciente, liderado por Ingredion y la firma consultora Opinaia, reveló que el 90% de los sudamericanos están interesados en consumir alimentos a base de plantas para lograr una dieta más saludable. La encuesta registra que en el 67% de los países encuestados (Colombia, Chile, Brasil, Argentina y Perú), las marcas sustentables son consideradas importantes.
Las razones son variadas: los precios más altos de los productos de origen animal, las altas emisiones de gases de efecto invernadero, el alto consumo de agua y deforestación que implican los alimentos de origen animal, la búsqueda de alimentos más saludables y la consideración ética hacia los animales.
La pandemia también ha acelerado esta tendencia. Las medidas de confinamiento y las alarmas sanitarias han hecho que las personas reconecten con la comida en múltiples niveles, ahora reflexionamos sobre el origen y el impacto que tienen nuestros alimentos. La FAO y las Naciones Unidas han alertado sobre la huella climática, la deforestación y la pérdida de biodiversidad ocasionada por los productos animales, al tiempo que señalan a la ganadería intensiva como uno de los posibles impulsores de futuras pandemias.
Otro indicador importante de la tendencia es el ranking elaborado por ‘Whole Foods Market’, que apunta que los consumidores optarán por alimentos más saludables y sustentables. El interés por los probióticos, los superalimentos y los ingredientes 100% vegetales serán el foco de la demanda, al ser los ingredientes que pueden fortalecer el sistema inmunológico y promover el cuidado del planeta.
Cómo incorporar más alimentos vegetales
Cambiar nuestra dieta es más fácil, sano y sabroso de lo que muchos piensan. Aquí van algunas ideas:
- Sumar legumbres a nuestras preparaciones. Los garbanzos, porotos, arvejas, lentejas pueden agregarse a ensaladas, sopas, guisos y también ser empleadas como base en preparaciones dulces. Son además una importante fuente de proteínas de origen vegetal.
- Incorporar semillas, fuente de minerales y fibra y Omega. Podemos agregarlas a licuados, ensaladas de fruta y panificados.
- Hacer licuados con frutas nos permiten incorporar variedad de frutas, frutos secos y semillas.
- Optar por sustitutos. Para algunos no es fácil dejar los sabores a los que estamos acostumbrados de un día para el otro. La buena noticia es que hoy en día podemos encontrar prácticamente todos los alimentos tradicionales en su versión vegetal. De esta manera, podemos obtener embutidos, carnes vegetales a base de gluten de trigo o soja, quesos sin lácteos y bebidas a base de cereales similares a la leche de vaca. Podemos encontrarlos en supermercados y dietéticas o incursionar en la cocina y hacerlos nosotros mismos.
- Buscar programas de tutoría: existen programas gratuitos, con recetas fáciles veganas, donde podemos incursionar en la cocina en la comodidad de nuestros hogares. En la página www.desafio21diasveg.com las personas pueden anotarse gratuitamente y comenzar a aprender sobre cocina y nutrición durante 21 días en este programa que es supervisado por nutricionistas y totalmente gratuito.
- Buscar ayuda y asesoría: existen muchos profesionales de la salud especializados en nutrición a base de plantas. Hacer una consulta también puede ser un buen paso.
Todos nosotros podemos hacer nuestra parte para conservar el planeta que queremos para nuestros hijos y nietos por medio de nuestra comida porque el mundo necesita un cambio de hábitos urgente y los ciudadanos deseamos y debemos ser agentes de esta transformación.
Con este logro seguramente vamos a probar increíbles nuevos sabores y beneficiar también a nuestra salud.