Cuscús marroquí paso a paso y en diez minutos
El cuscús marroquí es un plato muy antiguo originario de países del norte de África. Según algunos investigadores, los bereberes (conjunto de etnias del norte africano) ya se consumía cuscús unos cien años antes de Cristo.
Este plato hecho a base de sémola de trigo molida, con tanta tradición e historia, tiene aromas y sabores deliciosos y nutritivos. Aquí te dejamos una receta muy sencilla de cuscús marroquí.
Propiedades nutricionales del cuscús
Existen distintas propiedades nutricionales en un rico plato de cuscús marroquí. El cuscús está considerado como uno de los cereales con un mayor aporte proteico. Se estima que un 13% de su composición es de proteínas, importantes para mantener todos los tejidos del organismo.
Otro de los componentes de cuscús es la fibra. La fibra ayuda a regular las funciones del sistema digestivo, previniendo el estreñimiento. También colabora con el control del peso corporal, ya que da una gran sensación de saciedad.
El cuscús también es rico en vitamina B y ácido fólico que contribuyen con el buen funcionamiento del sistema nervioso, el cerebro y el sistema inmune. Junto a ello, contiene una importante cantidad de selenio, importante en el funcionamiento del metabolismo y la salud cardiovascular. Por último, es un antioxidante que previene el deterioro de las células del organismo.
Receta de cuscús marroquí
Ingredientes:
- 300 gr de cuscús
- 300 ml de caldo de verduras
- 1 pimiento mediano amarillo
- 200 gramos de calabaza
- ½ zuquini grande
- 2 dientes de ajo grandes
- Especias: curry, jengibre, canela y comino en polvo
- Cilantro
- Pasas
- 1 cucharada de manteca
- Aceite de oliva
- Pimienta negra
- Sal
Cómo preparar cuscús marroquí:
- Lavar las verduras y cortarlas luego en pequeños dados.
- Picar el ajo en trozos muy pequeños, añadir a la verdura y sofreír en una sartén con aceite de oliva a fuego medio.
- Cuando falte poco para que las verduras queden al dente, añadir las pasas, la canela en polvo, el comino y el jengibre.
- Calentar 200 mL de caldo de verduras (también puede ser caldo de carne o pollo para dar sabor). Cuando hierva, retirar del fuego y poner en la cacerola el cuscús. Dejar que se hidrate durante aproximadamente tres minutos con la cacerola tapada para que no se escape el calor.
- Una vez que hayan pasado los tres minutos, añadir la manteca (que se puede sustituir por el aceite de oliva) y remover. Esto se hace para que el cuscús quede suelto.
- Añadir las verduras y poner el cilantro finamente picado para adornar y aromatizar el cuscús marroquí.