5 trucos para saber si los jeans son de tu talle sin probártelos (no fallan nunca)
Llegar al local, encontrarte con uno de los jeans de tus sueños y decidir comprarlos. Antes, pasar por el probador. Pero, con una simple mirada, la cola para ver si los talles son los correctos es larguísima y no avanza. Sumado, el coronavirus pone a todos en alerta y no pasar por ahí puede ser una forma de achicar las posibilidades de contraerlo.
Dos opciones, dejar la prenda o apelar a la creatividad. Si no pensás en dejar el pantalón, la segunda estrategia puede salvarte. En este caso, con un truco simple y sencillo, que está siempre a disposición.
Se trata del “truco del cuello”. ¿Cómo? Sí, truco del cuello. Para los jeans, es ideal; una forma rápida de solucionar idas y vueltas el local a tu casa y de tu casa al local.
Para llevarlo adelante, solo necesitas llevarte la prenda al cuello. Efectivamente, tenés que rodearlo con la cintura de los jeans y luego comprobar si los extremos llegan a tocarse o quedan distantes.
Si los extremos no llegan a unirse, es porque los jeans te van a quedar chicos. Ahora, si se superponen… te van a quedar grandes. Buscar la talla que haga que los límites de la cintura se toquen justo, es lo que vas a estar buscando.
Otros trucos infalibles:
1. La regla del hombro
Si no querés llevarte la prenda cerca de la cabeza, podés resolver el problema de otra manera. Se trata, simplemente de apelar a otro viejo truco. En este caso, el del hombro. Para hacerlo, se dobla el pantalón y se pone cada extremo de manera paralela al hombro. Si la parte más ancha no te llega al hombro, entonces el pantalón es chico. En el caso de que se pase, es grande. De llegar justo, estás frente a tu talle.
2. La regla del puño:
No es la primera vez que te llevás al probador tu talla habitual y tienes que salir a por una más pequeña o más grande. Por desgracia, los números no siempre se corresponden con la realidad y por eso es tan efectivo utilizar este sencillo truco de costurera: si tu antebrazo, del codo al puño cerrado, cabe en la cintura del pantalón, es que es de tu talla. Esto sólo garantiza que entrarás en ellos y descarta que te queden muy grandes, pero ¡ojo! no asegura que te vaya a gustar cómo te quedan.
3. Compará en los hombros cómo serán en la cadera
Para averiguar si será más suelto o más ajustado en la zona de la cadera, los muslos y el trasero, podés enfrentar el punto más ancho del pantalón con la medida entre tus hombros. Tomá el pantalón por los extremos, en su punto más ancho y comparalo con el ancho de tus hombros, si la diferencia entre la tela y tus hombros es muy grande, es probable que el pantalón sea demasiado pequeño. Cuanto menor sea la diferencia, más favorecedor.
© Carola de Armas
4. Cómo saber si unos chupines son muy estrechos
Y ahorrarte ese momento en que te das cuenta de que los skinny jeans son tan skinny que no pasan del tobillo. Probá simplemente a meter el puño por la pernera. Si llega al final sin dificultades también los harán tus piernas.
5. El truco para saber la longitud perfecta
Basta con sostener el pantalón por el final de las perneras pegado a tu cuerpo con los brazos en cruz de manera que la cinturilla caiga hacia el abdomen y la entrepierna quede a la altura del cuello. Las manos deben estar dobladas sobre los extremos, con las perneras recorriendo el antebrazo hasta la palma y los dedos asomando por la parte exterior. Cuando los pantalones quedan perfectamente estirados, tienen el largo perfecto. Si tus brazos están flexionados, serán un poco cortos y si el pantalón no están tenso, será un poco largo.